En el bautizo de su hija, Lucía Salazar descubrió que su esposo Mateo Zárate la había engañado con su mejor amiga, Isabela Suárez, y que su verdadera hija había sido asesinada por ella. La niña que crió era hija de ambos. Lucía ocultó su dolor, tramó su venganza y años después reveló la verdad, destruyéndolos y recuperando todo lo perdido.

Isabella Linz fue abandonada por Santiago Fuentes el día de su compromiso y marcada como “mujer de mala suerte”. Siete años después, ya casada con Matías Fuentes y madre de Thiago, su infierno regresó. Santiago volvió con Natalia embarazada y acusó a Isabella de infidelidad. Justo cuando todo parecía perdido, Matías apareció... y el silencio se rompió.

León Vidal y Dánae Costanza, antiguos amantes, se reencontraron años después y reavivaron su pasión, solo para descubrir que ambos estaban comprometidos. Mientras uno luchaba por mantener el vínculo, el otro se alejaba… hasta que supieron que sus prometidos eran el uno para el otro.

Ana Álvarez, una pianista, hizo un trato con el empresario Luis Gutiérrez , fingir ser Estrella Fernández, la heredera muerta de los Fernández, para salvar a su hermano Andrés. En el proceso, se enamoró de Luis, pero los secretos y las trampas de Daniel, el hijo adoptivo, casi los destruyen. Al final, revelaron la verdad y encontraron redención juntos.

Valentina Soler, hija del director general de la Base de Aviación, llevó a su hijo Lucas a visitar a su padre Diego Martínez. Al llegar, descubrió que Diego ya se había casado con Camila Flores en la base. La aparición de Valentina desencadenó una violenta reacción de la familia Flores. Cuando Diego la culpó de todos los conflictos, Valentina decidió contraatacar.

Adriana fue la amante secreta de Nathan durante 3 años. Ahora se va a casar con otra persona, y él se vuelve loco.

Luna era una mujer marginada, denostada como incapaz y de mala conducta, y vista como la madre cuestionable de Lucas. Cuando su prometido Adrián se casó con otra, Luna, vestida de novia, saltó de la muralla. Pero una maestra de artes marciales ocupó su cuerpo y, con habilidades extraordinarias, vengó su honor. Junto con Lucas, superaron obstáculos, ganaron respeto y reescribieron su destino.

Ella creyó que lo valía todo, pero él nunca soltó el pasado. La dejó sola en el altar por una llamada de su exnovia. Le escribió una despedida y desapareció. Él pensó que volvería. Hasta que la vio con otro apellido. Entonces, fue él quien cayó de rodillas.

El protagonista masculino fue forzado a tener una relación con la protagonista femenina. Tras ello, ella lo hirió gravemente, dejándolo en silla de ruedas. Cinco años después, ella regresó con éxito, sin imaginar que ambos se guardaban sentimientos el uno por el otro.

Huérfana desde niña, Luna Guzmán creció bajo el abuso de su cuñada mayor en casa de su hermano, sobreviviendo como bordadora. Simón Fernández, el temido Dios de la Guerra, fue engañado por su madrastra y hermanastro para que dejara descendencia con una cortesana. Una noche, drogado, confundió a Luna—que entró accidentalmente a su habitación—con una prostituta y la tomó por fuerza.